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lunes, 19 de noviembre de 2012

Los chicos son coquetos


Asisto regularmente al gimnasio municipal, que si bien no es nada glamouroso, reune las condiciones mínimas para hacer lo que me gusta: practico ejercicios aeróbicos con la bici estática y la cinta para correr que la verdad me gusta bastante menos. Cuando me subo a la bici llevo un libro bueno y eso me asegura mayor rendimiento. Después hago mis cositas moderadas con las máquinas. Ese es el momento que aprovecho para espiar a los chicos/tíos. Si, me encanta espiarlos. Hay que ver las posturitas sexi, los gemidos, Dios mío, y las miradas prendidas de los espejos. Son muy pero que muy coquetos, narcisistas ellos. Y si escucharan las conversaciones: se dicen recetas de porquerías que toman "para quemar la grasa". Y no faltan los pobres flaquitos esmirriados que se dejan la piel con las mancuernas. Les puedo asegurar que lo de los musculitos es verdadero "trending topic". Hace mucho que la preocupación por lograr un cuerpazo 10 ha dejado de ser cuestión exclusiva de las pobres mujeres que se ven obligadas a combatir cualquier resto de grasa abdominal. Ellos ya han caído en la trampa de la imagen. Y aquí va la historia un poco científica procedente del NYT (ah por cierto el ultra famoso NYT escribió  que Cristiano Ronaldo era brasileño, manda huevos que no se enteren de algo tan crucial, vamos). Según un estudio dado a conocer el lunes en "Pediatrics", más del 40% de los estudiantes de enseñanza media y bachillerato consultados dijeron que hacían ejercicios regularmente a fin de incrementar su masa muscular. El 30% dijo consumir suplementos de proteinas y un 6% reconoció tomar esteroides. Un psiquiatra reporta un notable cambio de actitud respecto a la apariencia en los varones. Pues eso, lo que yo ya había constatado en el gimnasio está avalado por datos científicos.
"In a study to be published on Monday in the journal Pediatrics, more than 40 percent of boys in middle school and high school said they regularly exercised with the goal of increasing muscle mass. Thirty-eight percent said they used protein supplements, and nearly 6 percent said they had experimented with steroids.
Over all, 90 percent of the boys in the survey — who lived in the Minneapolis-St. Paul area, but typify what doctors say is a national phenomenon — said they exercised at least occasionally to add muscle.
“There has been a striking change in attitudes toward male body image in the last 30 years,” said Dr. Harrison Pope, a psychiatry professor at Harvard who studies bodybuilding culture and was not involved in the study. The portrayal of men as fat-free and chiseled “is dramatically more prevalent in society than it was a generation ago,” he said.
While college-age men have long been interested in bodybuilding, pediatricians say they have been surprised to find that now even middle school boys are so absorbed with building muscles. And their youth adds an element of risk.
Just as girls who count every calorie in an effort to be thin may do themselves more harm than good, boys who chase an illusory image of manhood may end up stunting their development, doctors say, particularly when they turn to supplements — or, worse, steroids — to supercharge their results.
“The problem with supplements is they’re not regulated like drugs, so it’s very hard to know what’s in them,” said Dr. Shalender Bhasin, a professor of medicine at Boston. 

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