Tetas sanfermineras

Desmadre sanferminero sin tetas al aire

He leído que durante la fiesta mejor del mundo, Sanfermines claro, se pueden haber producido ataques de índole sexual (agresiones o intentos de violación) perpetrados contra, de momento, dos denunciantes. Pero opino, y es una puñetera opinión, que una cosa es el desmadre orgiástico que se monta en determinados momentos como el txupinazo y conciertos moviditos, y otra es un intento de violación. Las mujeres hace mucho tiempo, y se lo han ganado a pulso, son dueñas de hacer con su cuerpo serrano lo que les de la gana. Si a una mujer medio borracha, sobria o medio sobria, le pide el alma y el cuerpo mostrar sus santísimas tetas, pues benditas sean. Y si de esa manera se expone al magreo generalizado, multitudinario y erótico del personal masculino, a lo que si les parece llamemos "tocamientos deshonestos", repito si lo hace voluntariamente, con el conocimiento informado de una adulta, pues al menos yo, no tengo nada que objetar. Eso sí, en semejante situación que nadie espere un comportamiento respetuoso, civilizado de una manada de machos en celo, ya que el macho humano no conoce épocas de reposo, y la ingesta de alcohol los pone muy salidos. Hay que decir que la mayoría de las fotos que inundan la red muestran mujeres sonrientes, firmes sobre los hombros de un mozo, bañadas en vino y rodeadas de manos ansiosas de eso, de tocar teta como se toca el santo en Compostela. La verdad es que no deberíamos confundir las cosas. Y que a nadie se le ocurra salir con el odioso "van provocando", respecto a las mujeres en top less. Somos bastante hipócritas. Nuestras sociedades están plagadas de machismo. Claro que hay que plantar cara a la agresión machista. Pero hacerlo frente a todas, hasta a las de guante blanco. Y si hay mujeres, y claro que existen, que quieren disfrutar de una bacanal  pues cosa de ellas, si lo eligen.

La nostalgia es sana

¿Quién no ha sentido alguna vez nostalgia?. Esa sensación de querer recuperar parte del pasado. Algo que también conlleva cierto dolor. O añoranza. Pues bien, hasta hace poco no todos los psicólogos consideraban sana dicha tendencia. Tal vez era un signo de depresión, pensaban. Gracias al trabajo del investigador Sedikides y sus colegas, que decidieron investigar qué se escondía de ciencia detrás de la apariencia nostálgica, parece ser que la nostalgia tiene su lado positivo, que no es síntoma patológico sino un sentimiento universal. La próxima vez que se pongan nostálgicos mejor celebrarlo como puedan. Aquí les dejo el enlace. El articulo procede del NYT.

A Universal Feeling

In the 19th and 20th centuries nostalgia was variously classified as an “immigrant psychosis,” a form of “melancholia” and a “mentally repressive compulsive disorder” among other pathologies. But when Dr. Sedikides, Tim Wildschut and other psychologists at Southampton began studying nostalgia, they found it to be common around the world, including in children as young as 7 (who look back fondly on birthdays and vacations).“The defining features of nostalgia in England are also the defining features in Africa and South America,” Dr. Wildschut says. The topics are universal — reminiscences about friends and family members, holidays, weddings, songs, sunsets, lakes. The stories tend to feature the self as the protagonist surrounded by close friends. Most people report experiencing nostalgia at least once a week, and nearly half experience it three or four times a week. These reported bouts are often touched off by negative events and feelings of loneliness, but people say the “nostalgizing” — researchers distinguish it from reminiscing — helps them feel better.

To test these effects in the laboratory, researchers at Southampton induced negative moods by having people read about a deadly disaster and take a personality test that supposedly revealed them to be exceptionally lonely. Sure enough, the people depressed about the disaster victims or worried about being lonely became more likely to wax nostalgic. And the strategy worked: They subsequently felt less depressed and less lonely.

Nostalgic stories aren’t simple exercises in cheeriness, though. The memories aren’t all happy, and even the joys are mixed with a wistful sense of loss. But on the whole, the positive elements greatly outnumber the negative elements, as the Southampton researchers found by methodically analyzing stories collected in the laboratory as well as in a magazine named Nostalgia.

Sanfermines: 2 min. de infarto

Y a veces ocurre lo que se muestra aquí. De terror, vamos.

Noten las caras que se le quedan a los mozos (y no tan mozos) cuando tienen encima la manada.

Vertiginoso, 2 min y 27 seg. de infarto. Así fue el encierro del día 9 de julio, declarado "Día del Guiri", que es como se conoce familiarmente en Spain a  los foráneos. Hay que reconocer que a San Fermín le rinden culto fiel numerosos extranjeros, fíjense si serán tantos que la población de la señorial Pamplona, alcanza el millón de habitantes y hablan en todas las lenguas. Las fotos proceden de la medioteca de RTE: