Vaya manía tiene cierto personal agorero de enterrarlo antes de hora. Y Fidel, ese gallego tan bronco como listo, resucita. La verdad es que no me puedo desprender de su sombra histórica. Forma parte de mi infancia. Es el personaje cuya voz un poco rota acompañaba nuestra juventud. Ahora es un anciano de 86 años. Es decir está muy avanzado en la cuenta atrás que nos persigue a todos. Para sus rabiosos enemigos la mala salud de hierro de Fidel es como un grano en el ano. La historia que a él tanto le importa lo juzgará. Mientras tanto yo prefiero perdonarle todos los experimentos que hizo con mi generación. Los terribles desencuentros, las rupturas familiares, las persecuciones variopintas. Y decirle:Comandante pa´lante y pa´lante mientras el body aguante. |
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lunes, 22 de octubre de 2012
La última muerte de Fidel Castro
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