Los presentes ejemplos son la punta del iceber. Dan una idea del problema. Pero ignoran por ejemplo, la desigualdad salarial de la mujer en muchos países de la Unión Europea. Y respecto a Arabia Saudita, nos quedamos muy cortos. En dicho emporio petrolero las niñas, a partir de nueve años pueden convertirse en novias o esposas. No se espera ni a la pubertad. Las presuntas transgresiones del código marital llevan a la mujer a la muerte por lapidación, si el marido o su familia así lo solicitan. La lactancia materna es obligatoria, la violación dentro del ámbito del hogar, frecuente y admitida. Sad but true, nuestros valientes y poderosos aliados coinciden con los preceptos del califato terrorista EI (ISIS).
Equality Now, una organización destinada a la defensa de los derechos humanos de las mujeres y niñas de todo el mundo, ha lanzado una campaña contra 44 Gobiernos por su, aún vigente, legislación discriminatoria hacia la mujer, informa 'The Daily Beast'. Algunas de las demandas de derogación hacen referencia a las siguientes leyes:
"La mujer casada puede ser violada". La violación dentro del matrimonio es legal en la India bajo la fórmula de "las relaciones sexuales o actos sexuales por parte de un hombre hacia su esposa, si esta no es menor de 15 años, no está considerado violación". Una ley similar está vigente en Singapur, donde la violación por un cónyuge está aceptada siempre y cuando la mujer tenga más de 13 años; y en las Bahamas, donde está aceptada si la mujer tiene más de 14 años.
"La mujer puede ser secuestrada". En Malta y el Líbano una mujer puede ser secuestrada sin que se presenten cargos contra el criminal si este se casa con la víctima. Asimismo, si el matrimonio se produce después de que el delincuente sea juzgado y condenado, el cargo 'se borra' automáticamente. Leyes similares fueron derogadas en la última década en países como Costa Rica, Etiopía, Guatemala, Perú y Uruguay.
"La mujer puede ser golpeada". En Nigeria, la violencia por parte de un marido "con el fin de corregir a su esposa" se considera lícito.
REUTERS/Afolabi Sotunde
"La mujer no puede ser mano de obra". En China, las mujeres no pueden trabajar "en la cantera de una mina" o realizar trabajos que requieran esfuerzos físicos grandes.
"La mujer no puede conducir". En Arabia Saudita una fetua que data de 1990 sostiene que las mujeres tienen prohibido conducir debido a que una mujer conduciendo es "una fuente de innegables vicios" , tanto como un encuentro privado entre un hombre y una mujer o una mujer sin velo. A principios de febrero, un historiador saudita afirmó que "la mujer occidental conduce porque no le importa ser violada".
"El marido debe elegir el trabajo de la mujer". En la República Democrática del Congo "una mujer está obligada a vivir con su marido y a seguirle a donde él estime oportuno residir" y no puede tener compromisos sin la autorización de este. Así, es prácticamente imposible que una mujer congoleña abra un negocio o elija dónde quiere trabajar. En Guinea, la mujer no puede buscar trabajo si su marido se opone.
"La mujer no puede ser mano de obra". En China, las mujeres no pueden trabajar "en la cantera de una mina" o realizar trabajos que requieran esfuerzos físicos grandes.
"La mujer no puede conducir". En Arabia Saudita una fetua que data de 1990 sostiene que las mujeres tienen prohibido conducir debido a que una mujer conduciendo es "una fuente de innegables vicios" , tanto como un encuentro privado entre un hombre y una mujer o una mujer sin velo. A principios de febrero, un historiador saudita afirmó que "la mujer occidental conduce porque no le importa ser violada".
"El marido debe elegir el trabajo de la mujer". En la República Democrática del Congo "una mujer está obligada a vivir con su marido y a seguirle a donde él estime oportuno residir" y no puede tener compromisos sin la autorización de este. Así, es prácticamente imposible que una mujer congoleña abra un negocio o elija dónde quiere trabajar. En Guinea, la mujer no puede buscar trabajo si su marido se opone.
REUTERS/Aly Song
"La mujer recibe menos herencia que el hombre". En Túnez, a las mujeres se les permite por ley recibir únicamente la mitad de la herencia y, según la región, a las hijas se les conceden solo dos tercios de la cantidad que se les dejó en herencia mientras que "los hijos heredan el doble que las hijas".
"La mujer puede ser asesinada si es infiel". En Egipto, la ley sostiene que "cualquiera que sorprenda a su esposa cometiendo el acto del adulterio y la mata será castigado con una detención" en lugar de los 20 años que corresponden por asesinato.
"Una mujer no se puede divorciar". En Israel, el matrimonio y el divorcio entre ciudadanos judíos están regulados por la ley rabínica, que sostiene que las mujeres tienen menos derecho a divorciarse que los hombres, quienes "no están obligados a conceder el divorcio".
"El testimonio de la mujer no vale lo mismo". En Irán, una mujer tiene derecho a declarar ante un tribunal únicamente si sus palabras están respaldadas por dos testigos masculinos. Así, en la mayoría de las testificaciones por delitos, el número de hombres debe duplicar al de mujeres.
Lea también: Las leyes más descabelladas del mundo
"La mujer recibe menos herencia que el hombre". En Túnez, a las mujeres se les permite por ley recibir únicamente la mitad de la herencia y, según la región, a las hijas se les conceden solo dos tercios de la cantidad que se les dejó en herencia mientras que "los hijos heredan el doble que las hijas".
"La mujer puede ser asesinada si es infiel". En Egipto, la ley sostiene que "cualquiera que sorprenda a su esposa cometiendo el acto del adulterio y la mata será castigado con una detención" en lugar de los 20 años que corresponden por asesinato.
"Una mujer no se puede divorciar". En Israel, el matrimonio y el divorcio entre ciudadanos judíos están regulados por la ley rabínica, que sostiene que las mujeres tienen menos derecho a divorciarse que los hombres, quienes "no están obligados a conceder el divorcio".
"El testimonio de la mujer no vale lo mismo". En Irán, una mujer tiene derecho a declarar ante un tribunal únicamente si sus palabras están respaldadas por dos testigos masculinos. Así, en la mayoría de las testificaciones por delitos, el número de hombres debe duplicar al de mujeres.
Lea también: Las leyes más descabelladas del mundo