En la visita del heredero del Jefe de Estado, Felipe de Borbón a Lleida, Cat, hubo de todo: parabienes, saludos institucionales y sonoras rechiflas y consignas independentistas por parte de un grupo de personas que el diario madrileño "El Mundo" cifró en torno a 50. En cualquier caso, y rodeados por una buena dotación de fornidos "mossos", los independentistas y/o soberanistas enarbolaron esteladas y carteles. Todo de forma pacífica y sin insultar. Pero al príncipe le debió molestar lo suyo. Hay fotos que lo muestran con cara adusta. Total, que tragó sapos en Lleida. |
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jueves, 11 de abril de 2013
El heredero traga sapos
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